Diumenge 33 de durant l'any - 14 de novembre
Lucas 21, 5-19
Este texto nos habla de los últimos días, desde tiempos antiguos han habido muchas personas que se han atrevido a poner día y hora al fin del mundo y al retorno de Cristo , muchos de ellos motivados por situaciones que se escapan del control humano como pueden ser terremotos, epidemias , la aparición de algún cometa o cosas semejantes.
En relación a todo esto dijo el Señor Jesús que ni el día ni la hora lo conoce nadie, solamente el Padre “Mar 13:32 Pero de aquel día y de la hora nadie sabe, ni aun los ángeles que están en el cielo, ni el Hijo, sino el Padre.”
Esto nos hace pensar que nuestra vida debe estar preparada para el día en que nos encontremos con Cristo, porque nadie sabe el momento “Mateo 25:13 Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de venir.”
Podemos ver que la vida de los creyentes no está exenta de angustias pues existen muchos momentos en los que es necesario permanecer fieles para dar testimonio del Señor.
En la actualidad hay lugares del mundo donde ser cristiano es muy difícil, es cierto que en los países occidentales, pocos de nosotros hemos sufrido a causa de nuestra fe, pero no debemos imaginarnos que no pueda pasar.
En estos versículos se nos anima a reflexionar sobre la dependencia en Dios para decir cuanto sea necesario y resistir hasta el fin, sea en ese tiempo o en las dificultades actuales.
Todo cristiano sabe que su vida depende del Señor y que ni un cabello de su cabeza cae sin la orden Divina.
Las consecuencias de la fidelidad son notables pues el Salvador se compromete a estar a su lado.
Este texto nos habla de los últimos días, desde tiempos antiguos han habido muchas personas que se han atrevido a poner día y hora al fin del mundo y al retorno de Cristo , muchos de ellos motivados por situaciones que se escapan del control humano como pueden ser terremotos, epidemias , la aparición de algún cometa o cosas semejantes.
En relación a todo esto dijo el Señor Jesús que ni el día ni la hora lo conoce nadie, solamente el Padre “Mar 13:32 Pero de aquel día y de la hora nadie sabe, ni aun los ángeles que están en el cielo, ni el Hijo, sino el Padre.”
Esto nos hace pensar que nuestra vida debe estar preparada para el día en que nos encontremos con Cristo, porque nadie sabe el momento “Mateo 25:13 Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de venir.”
Podemos ver que la vida de los creyentes no está exenta de angustias pues existen muchos momentos en los que es necesario permanecer fieles para dar testimonio del Señor.
En la actualidad hay lugares del mundo donde ser cristiano es muy difícil, es cierto que en los países occidentales, pocos de nosotros hemos sufrido a causa de nuestra fe, pero no debemos imaginarnos que no pueda pasar.
En estos versículos se nos anima a reflexionar sobre la dependencia en Dios para decir cuanto sea necesario y resistir hasta el fin, sea en ese tiempo o en las dificultades actuales.
Todo cristiano sabe que su vida depende del Señor y que ni un cabello de su cabeza cae sin la orden Divina.
Las consecuencias de la fidelidad son notables pues el Salvador se compromete a estar a su lado.
Pastor Rafael Diez
Iglesia Evangélica
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